Ondas de un suave mar:
(la sinfonía de Mozart)
La luz celeste, la melodía y claridad.
Definen esas notas su genio musical.
Juego insuperable de claves, violines y aires.
Programan netamente la esencia, augusta, del arte Clásico.
Digo Clásico y nombro lo Eterno, lo Perfecto.
¡Evidente!. El Espíritu Divino está en él.
La línea excelsa de sus sonidos,
exige, reclama, atención devota.
Y, sobre todo, se enciende, levita, mi alma,
en mi ambiente, al escucharlo.
Ando descalza
Ando descalza, por las calles soleadas de mi música
soltando pájaros blancos de mis manos
besando las pupilas negras de soles amarillos
ando descalza, sobre pasto tierno y acordes azulados
y si en un sueño canto en Inglaterra
sobre pasto verde y cielo gris
ando descalza
y escucho el corazón del mundo
que canta mejor que cualquier río
música música
abeja dorada que zumbas en mi alma
qué hermoso verano el tuyo, ¡tan eterno!
(y todo se vuelve mágico y bendito si entre tus ojos y los míos ponés una canción)
Autora: Gilberta Anatonia Caron
En las calles
Calles diurnas calles nocturnas
la música rueda asfalto y empedrado bajo nuestros pies
debajo de lo oscuro acaricio lo claro
dibujando con notas y palabras los muros deslucidos
de una ciudad rendida
la música del alma siempre será nuestra luz
y el asilo de los hombres y la humanidad siempre será el amory cuando regreso, por la puerta de casa
entran conmigo todas mis canciones
y si alguna queda afuera
¿cómo podría saberlo yo?
Autora: Gilberta Anatonia Caron
En el corazón de la vida
En el corazón de la vida
fuego en tus ojos que no palidece
la música te sonríe
se enamora
te alcanza una bendición
su propia llama
Autora: Gilberta Anatonia Caron
Sin pensarlo
Y me senté sin pensarlo
sobre una ola de un río musical y profundo
mientras los árboles honraban cada melodía de la noche
y las estrellas subían pentagramas hasta mi corazón
y me senté sin pensarlo-y aunque dormida-no hubo nada que no escuchara y se escapara a mis oídos
y jamás fue tan fuerte la voz de la mañana
y jamás fue tan hermosa la voz de una canción
Autora: Gilberta Anatonia Caron
Pero la música tiene un diamante
De hierro de mármol y sal
también es este mundo
de odio de mentiras de guerras
de locura y soledad y muerte
y de resignación
pero la música tiene un diamante
que blande como una espada que brilla y resplandece
siempre canta y canta
y escribe con palabras y armonía
el alma de los hombres
haciendo milagros
iluminando todo con una canción
Autora: Gilberta Anatonia Caron
Por eso seguí cantando
Ya sé que también hay cosas que son un asco ya sé
y que también hay cosas que son mentira y ya sé
y que de espuma y de arena y de crepúsculo
la vida entonces se apena y se desvanece el día
por eso por favor seguí cantando
porque sin embargo y entre tanto y todo
la belleza persiste
Autora: Gilberta Anatonia Caron
Inspiración
De dónde saliste
con tantas canciones en las manos
distraída
casi despierta
y pensativa te llevaste por delante
los acordes enteros de la primavera
las pupilas azules del invierno
la hojarasca deshilachada del otoñoy el calor recalcitrante de un verano carmesí
y sin embargo vos jamás estarás loca
¡pero nosotros sí!
Autora: Gilberta Anatonia Caron
Es la música que canta fuerte
La muerte esta vencida
y detrás del dolor se deshacen las ruinas y la noche
el invierno se esconde
la maldad tropieza y la pobreza se confina
¿qué pasa?
es la música que canta y canta fuerte
y el cielo se puso lavanda y rosado y la humanidad feliz
y las alas vuelven para hacer al pájaro
y se desparrama amarillo por el mundo
ella hizo nuevas canciones para la voz del viento y de las nubes
Y por alguna razón,
calmó los mares y suavizó la mirada de los hombres
no digo que el mundo pueda arreglarse definitivamente
Pero al menos
–aunque sea por instantes si alguien canta-
mucho de la tristeza tuvo fin
Autora: Gilberta Anatonia Caron
Una sonrisa
Una sonrisa vagaba sola por la calle
y tropezó con mi canción
y cada estrella de la noche ascendente se reía como loca
y cada llama de los ojos se tiñó de sol
Autora: Gilberta Anatonia Caron
Que todo lo cambia
En este atardecer
el horizonte en silencio se derrama
la sombra amarilla de un re mayor que se ensancha y canta
la voz azul platino de un breve si menor
qué sería del mundo sin la música
que todo lo cambia
cambia mi visión cambia mi cuarto
cambia el cielo y la tierra
y cambia la sangre y cada corazón
(y juro que recién tocaba un do bajo la lluvia
y segundos después un fa, y está saliendo el sol)
Autora: Gilberta Anatonia Caron
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